Shakira cerró anoche con un gran concierto la tercera jornada del Rock in Río y enloqueció con sus movimientos y su voz a las 75 mil personas que se hicieron presentes en Madrid.
Aunque la mayoría de los periodistas y el público esperaba ver a Amy Winehouse, luego de que hace unos días fue hospitalizada por una enfermedad pulmonar debido a su adicción al tabaco y las drogas, la colombiana se convirtió en la más ovacionada de la noche.
Inicia su conciert con 'Te dejo Madrid' y un "buenas noches, campeones de Europa" la cosa no sólo promete: ya los tiene a todos en el bolsillo sin comenzar siquiera a mover las caderas.
Claro, que cuando sube los brazos, mira hacia el cielo y la falda se bambolea... "Madrid, esta noche soy toda tuya".
Negro en chaleco y pantalón, ombligo al aire, y muchas ganas de gustar. Fuerza la voz en 'Inevitable' y, a falta de su amiguísimo Alejandro Sanz sobre el escenario, quien por cierto actúa el sábado, la de Barranquilla se apoya en un tal Albert Menéndez para marcarse 'La tortura' y el público baila, vocea y alza las manos.
Ella responde con dosis de pelvis y les lleva a 'Si te vas' y su despecho y al 'Suerte' y al optimismo. Danza del vientre, falda roja, descalza, látigo...
Luego sigue con "pies descalzos y " ciega sordomuda", y con Plan rockero, "dont bother' (única canción en inglés, que sabe bien que la gente prefiere corear), guitarra y 'Las de la intuición".
Decide terminar con 'Hips don't lie" y se va diciendo "Os quiero mucho. España, muchas gracias".
Aunque la mayoría de los periodistas y el público esperaba ver a Amy Winehouse, luego de que hace unos días fue hospitalizada por una enfermedad pulmonar debido a su adicción al tabaco y las drogas, la colombiana se convirtió en la más ovacionada de la noche.
Inicia su conciert con 'Te dejo Madrid' y un "buenas noches, campeones de Europa" la cosa no sólo promete: ya los tiene a todos en el bolsillo sin comenzar siquiera a mover las caderas.
Claro, que cuando sube los brazos, mira hacia el cielo y la falda se bambolea... "Madrid, esta noche soy toda tuya".
Negro en chaleco y pantalón, ombligo al aire, y muchas ganas de gustar. Fuerza la voz en 'Inevitable' y, a falta de su amiguísimo Alejandro Sanz sobre el escenario, quien por cierto actúa el sábado, la de Barranquilla se apoya en un tal Albert Menéndez para marcarse 'La tortura' y el público baila, vocea y alza las manos.
Ella responde con dosis de pelvis y les lleva a 'Si te vas' y su despecho y al 'Suerte' y al optimismo. Danza del vientre, falda roja, descalza, látigo...
Luego sigue con "pies descalzos y " ciega sordomuda", y con Plan rockero, "dont bother' (única canción en inglés, que sabe bien que la gente prefiere corear), guitarra y 'Las de la intuición".
Decide terminar con 'Hips don't lie" y se va diciendo "Os quiero mucho. España, muchas gracias".
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